Jueves 12 de diciembre de 2013.
Así era una tarde espléndida y soleada, ese fue mi primer pensamiento cuando me iba acercando al punto de encuentro que los compañeros de SAPAME habíamos fijado para subir a la Fundacion Rodríguez Acosta: casi siempre suele ser la fuente central de Plaza Nueva.
Gabri se había encargado de todo y todo a una comenzamos a subir la Cuesta Gomérez hasta llegar a la Fundación. Allí nos esperaba una guía que pronto nos encauzó en una fabulosa visita guiada. Nada más entrar pudimos ser testigos del conjunto de terrazas y miradores que jalonan en distintos niveles su jardín, mezcla de cierto romanticismo de tradición decimonónica con un interesante discurso iconográfico propio del simbolismo de principios del siglo XX. El Carmen, aunque se encuentra próximo a la Alhambra, no repite modelos de la arquitectura nazarí, tan sólo algunos elementos decorativos como las celosías de la terraza o el patio central. pero lo que más nos gustó a todos en general, además de las fabulosas vistas de nuestra ciudad, fue la biblioteca.
Jose María Rodríguez Acosta hizo construír el Carmen para utilizarlo como estudio de pintura y no como residencia, al cual no pudimos acceder porque era de uso privado. Desde la escalera estilo "art dèco" se accede a la biblioteca y al estudio. Sorprende la bilbioteca por su riqueza cromática y decorativa y por el lijo sereno del mobiliario.
El gusto cosmopolita de Rodríguez Acosta queda reflejado en su colección de libros que abarca variados temas así como en sus objetos de arte. Interesante de ver fue también la galería subterránea.
Al finalizar la visita decidimos reponer fuerzas tomando unas tapitas en el realejo. Bonito barrio, ¿verdad?
No hay comentarios:
Publicar un comentario